Fue cura de O Cebreiro (Pedrafita do Cebreiro) desde que se ordenó como sacerdote en 1957 hasta su muerte. Estaba muy comprometido con la gente de la montaña, con la educación de los jóvenes, con el desarrollo económico y cultural, con la restauración de la iglesia, la hospedería y el pueblo, con el Camino de Santiago, con su señalización y delimitación, así como con la atención a los peregrinos.
Su tesis doctoral, El Camino de Santiago: estudio histórico-jurídico, defendida en la Pontifícia de Salamanca el 5 de mayo de 1965, ha sido merecedora del Premio Elio Antonio de Nebrija.
En el año 1985, en el congreso celebrado en Santiago de Compostela, los días 22, 23 y 24 de mayo le nombraron comisario coordinador del Camino.
Ha promovido la creación de las asociaciones jacobeas, ha creado el Boletín del Camino, órgano de comunicación e información para las personas interesadas en la temática jacobea. Además, organizó el Congreso de Jaca en septiembre de 1987, un mes antes de que el Consejo de Europa declarara el Camino de Santiago como Primer Itinerario Cultural Europeo (23 de octubre de 1987).
Con su familia y sus amigos de León, Burgos y Navarra ha recorrido varias veces el Camino, señalizándolo con las flechas amarillas.
Fue autor de las primeras guías del Camino de Santiago y de otras publicaciones relacionadas con los documentos parroquiales y los bienes artísticos de la provincia de Lugo.